Cuenta la leyenda que el Islote de Hilario, en pleno corazón del Parque Nacional de Timanfaya, toma su nombre gracias al propio Hilario, un lanzaroteño que, después de luchar en la guerra de Filipinas, decidío optar por el retiro en una ermita en dicho islote durante más de medio siglo, sin más compañía que su camella.
Desde el jueves, 14 de febrero, a partir de las 20:00 horas, se mantendrá abierta al público la obra del grancanario José Rosales en el la Casa de la Cultura Benito Pérez Armas en Yaiza. La pintura de este autor recrea, en esta ocasión, la leyenda de Hilario. Rosales retrata a a este personaje solitario como un anacoreta en medio de un desolado paisaje en el que desarrolla su vida.