El alcalde de Teguise, Oswaldo Betancort, ha querido dejar claro este miércoles su malestar por el cierre que ha realizado Costas del acceso rodado a la zona del Rincón, en la playa de Famara, uno de los pocos lugares que quedan en Canarias para los amantes del aire libre, de la naturaleza y de la práctica de deportes como el surf.
El máximo responsable del Ayuntamiento no entiende cómo este departamento dependiente del Gobierno central ha tomado una decisión de ese calado sin nisiquiera haber consultado con las administraciones locales afectadas, empezando lógicamente por la institución en la que se encuentra ubicado ese paraje. Así, exige a los responsables de Costas y a los dirigentes del Partido Popular (PP), formación que gobierna en estos momentos en Madrid con mayoría absoluta, que realicen una reflexión y que se sienten a hablar sobre una cuestión que afecta seriamente no sólo a los vecinos de Teguise sino a los vecinos del resto de la isla de Lanzarote y a muchos de los turistas que nos visitan cada año.
Oswaldo Betancort dice ser un firme defensor de la protección a la naturaleza, mucho más en sitios sensibles como es Famara, aunque cree que con actuaciones de este tipo, que no es la primera que se realiza en Lanzarote, no se consigue el objetivo que en teoría se persigue. “Una cosa es ser respetuoso con el medio ambiente, que en Teguise lo somos como el que más, y otra cosa muy distinta es adoptar medidas que van en contra de la lógica y que suponen un grave perjuicio para todos aquellos a los que les gusta acceder a un lugar único como es el Rincón en la playa de Famara. De seguir así, van a conseguir que la gente sólo se pueda bañar en los lugares que acoten los responsables de Costas, y eso no lo debemos permitir”, subraya el alcalde visiblemente molesto.
Por todo ello, el máximo responsable del Ayuntamiento de Teguise hace un llamamiento a todos los organismos implicados en la cuestión y a todas las formaciones políticas para que se unan en una reivindicación que considera totalmente justa, que es la que tiene que ver con la retirada de los postes de madera que se han colocado para impedir el acceso a los vehículos a ese lugar y con la urgente necesidad de que se produzca algún tipo de reunión para aclarar ésta y otras cuestiones. “En este caso la unidad es muy importante, para que en Madrid entiendan que no se pueden adoptar estas decisiones de espaldas a un pueblo que está a muchos kilómetros de distancia, en ocasiones da la sensación de que a demasiados”, comentó Betancort, quien propone que se realice una jornada de trabajo con Costas para abordar el problema surgido en Teguise y cualquier problema similar que se pueda haber producido en otro municipio de Lanzarote.