La cala de la Playa El Ancla (conocida en Lanzarote como playa del Rey, por la cercanía de la residencia Las Maretas, primero propiedad del Rey de España como regalo del Rey Hussein de Jordania y ahora Patrimonio Nacional), en la entrada de Costa Teguise por Arrecife, es una de las mejores zonas de baño de este núcleo turístico. Su principal hándicap proviene de esta circunstancia y su escasa longitud, ya que es muy frecuentada por los residentes en la isla. En las primeras horas del día resulta un enclave encantador. La poca gente que se da cita aprovecha incluso para pasear en la orilla. Pasado el mediodía, la cala se satura, aunque los diques de piedra natural ofrece espacios diversos donde apostarse.
Sus tranquilas aguas tienen un color brillante. Apetece el chapuzón a simple vista. El viento, fiel acompañante de la vida en Costa Teguise, queda en un segundo plano por lo recogida que se encuentra esta cala. La segura orilla permite olvidarse de los críos y su lago más profundo, resguardada por los diques naturales, resulta una buena piscina natural donde darse unos largos de natación.
El Ancla tiene un acceso escalonado. En los alrededores de su entrada hay aparcamiento de sobra. Su fino jable se encuentra en perfecto estado y en su salida hay duchas que nos permiten asearnos toda vez que haya concluido la jornada de playa.
Resumen
Pequeña cala de 75 metros en la entrada de Costa Teguise. Playa limpia, rocosa, asocada y en buen estado.
Si llegas en coche hay aparcamientos.
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