Editorial

Editorial

«¿No te aburres en Lanzarote? Está muy bien para vivir, no lo dudo, pero, no sé…le falta vidilla». Probablemente, y en más de una ocasión, alguien cercano a usted le habrá abordado con la coletilla precedente. Es más, también resulta posible que ni siquiera haya falta de que le dejen caer la duda, ¿cuántas veces nos hemos preguntado internamente, «oye, ¿y qué hago hoy?» Pasa a menudo, pudiéndose transformar el tiempo libre, paradojas, hasta en un problema.

Acierta quien califica de pobre las posibilidades culturales y de ocio en general de Lanzarote. No vivimos en un territorio como Gran Canaria o Tenerife que pasa holgadamente del medio millón de habitantes, por lo que no contamos con la mínima masa crítica para aspirar a grandes acontecimientos del mundo del espectáculo. También influye en la triste valoración el papel de las instituciones públicas lanzaroteñas en la creación de la infraestructura de esparcimiento, cultura y deporte. El desajuste, en este sentido, se percibe con nitidez para coincidir que nuestros gobiernos deben superar esta fase de estancamiento y mejorar sus prestaciones.

Sin embargo, y a pesar de todos los pesares, Lanzarote produce ocio a diario en cantidad. Podemos aprovechar y nutrirnos de la lógica interna de nuestro motor económico, el turismo, que obviamente lucha por mantener a sus visitantes entretenidos. La isla, además, cuenta con su generación más preparada y con más inquietudes culturales, lo que condiciona favorablemente la generación de actividades y espacios activos en el terreno del ocio y la cultura.

Con este cuadro resultón, ¿por qué, entonces, mantenemos que nos aburrimos? Sin duda, nos aburrimos porque queremos, pero, no obstante, también afecta la escasa información relacionada con el mundo del ocio. Las ventanas abiertas hasta el momento, Infocultura (boletín quincenal), El Quíquere (boletín mensual y página web) y Mass Cultura (revista mensual), constituyen aire fresco a la hora de conocer lo que se cuece en el campo cultural lanzaroteño.

Es en el terreno informativo donde ociolanzarote.com confía en servir de herramienta de utilidad a la sociedad lanzaroteña. Desde hoy, 14 de enero de 2008, cuenta usted, a golpe de ratón, con una agenda actualizada a diario y los fines de semana, Ocio Hoy, así como las descripciones de los principales sitios que, a nuestro entender, enriquecen el tiempo libre en la cultura, el deporte, la restauración, el relax o la mera contemplación. Le deseamos que el disfrute de las opciones de ocio en Lanzarote le lleven, incluso, a obtener gozo de no hacer nada: «Es imposible gozar totalmente de no hacer nada si no se tienen muchas cosas que hacer», Jerôme Klapka (1859-1927), humorista británico.

Ahora sí, bienvenidos a Ocio Lanzarote.

También te puede gustar

Explora temas similares

Artículos similares:

Los locales feroces

Lanzarote vive del turismo. Últimamente más bien malvive pero sobrevive gracias al turismo. Una gran parte de la sociedad local se ha abierto a la gente que los honra con su visita, ha demostrado apertura de mente, se ha esforzado por presentar su mejor cara, su cordialidad, su educación. Y los visitantes se lo pagan, cada uno recordándonos que vivimos en un paraíso. Sin embargo, todavía existe un minoría étnica de la sociedad lanzaroteña, llamados “los locales feroces” al cual el dios del mar ha otorgado la misión de proteger sus aguas de la presencia bárbara de la sub-raza llamada los “surfista-de-fuera”.

Sí, lo recomiendo

Marisa García Hace alrededor de dos meses conocí a Coro, terapeuta en linfodrenaje Vodder. La experiencia me ha resultado muy positiva, tanto física como mentalmente. Es un masaje tan sutil...

Una cata para no olvidar

Y llegó como quién ve llegar a un amigo del pasado, de pronto, por sorpresa… nadie se esperaba que un vino del año 1881 fuera el que sin lugar a dudas y después de tantas joyas el que más color e intensidad tuviera de todos. Cosa lógica quizás en un vino de crianza reductiva pero no en uno con este tipo de crianza donde el oxígeno pide permiso para traspasar el roble y conferir a estos vinos sus característicos aromas ajerezados, sin duda no hay palabras por parte mía de poder describir este gran vino ya que mis conocimientos son muy limitados pero sólo diré que es lo mejor que he tenido la gran suerte de beber y sentir.